En primer lugar, porque dicha inversión tiene como objetivo el resucitar un espectáculo donde el público se divierte a costa del sufrimiento, del dolor y de la tortura de un animal.
En segundo lugar, porque en estos tiempos de crisis es un despilfarro el empleo del dinero pùblico en arreglar una plaza de toros, una finalidad que no crea empleo ni tejido productivo y que se encuentra incardinada en la más auténtica obsolescencia cultural.
Según señala el representante de la Coordinadora, Gerardo Pedrós, "valga el ejemplo de que en Córdoba capital ya solo hay corridas una vez al año en el recinto de los Califas, una sola semana en el mes de mayo".
Gastar ese dinero en algo que no produce apenas empleo, continúa Pedrós, "es un derroche propio de esta oligarquía política que nos gobierna y que vive en los arcanos, al margen de la modernidad y de la población a la que representa"
La Coordinadora Verde andaluza muestra su más absoluta disconformidad con el derroche de recursos económicos derivados de esta pésima inversión.
En segundo lugar, porque en estos tiempos de crisis es un despilfarro el empleo del dinero pùblico en arreglar una plaza de toros, una finalidad que no crea empleo ni tejido productivo y que se encuentra incardinada en la más auténtica obsolescencia cultural.
Según señala el representante de la Coordinadora, Gerardo Pedrós, "valga el ejemplo de que en Córdoba capital ya solo hay corridas una vez al año en el recinto de los Califas, una sola semana en el mes de mayo".
Gastar ese dinero en algo que no produce apenas empleo, continúa Pedrós, "es un derroche propio de esta oligarquía política que nos gobierna y que vive en los arcanos, al margen de la modernidad y de la población a la que representa"
La Coordinadora Verde andaluza muestra su más absoluta disconformidad con el derroche de recursos económicos derivados de esta pésima inversión.
Fuente: Coordinadora Verde de Andalucía